Santa Cruz
Según un informe preliminar, este hombre llegó hasta la vivienda de un familiar cuando dos perros de raza pitbull lo atacaron, mordiéndolo en varias partes del cuerpo.
Según informes, al ser un desconocido para los perros, estos lo atacaron de manera violenta hasta quitarle la vida. Mario Leaños, hermano de la víctima, expresó su pesar al señalar que los caseros de la vivienda no pudieron socorrer a Wilfredo, a pesar de sus desesperados gritos de auxilio durante el ataque.
«Vamos a pedir que estos perros (hembra y macho) sean sacrificados», declaró con tristeza Mario Leaños, quien busca justicia para su hermano fallecido.
La tarde de este miércoles, un hombre de 70 años de edad perdió la vida después que fue atacado salvajemente por dos perros de la raza pitbull. El trágico hecho se registró en una vivienda ubicada en Tipoy, en la zona del Plan Tres Mil.
La víctima fue identificada como Wilfredo Leaños, que según el reporte preliminar, llegó hasta la casa para visitar a sus sobrinos. Fue sorprendido por el feroz ataque de los canes.
Un grupo de vecinos grabó el ataque de los perros, mientras ambos animales no cesaban de morder al hombre que yacía en el suelo totalmente ensangrentado, y en ese momento pidiendo ayuda.
Solo la intervención policial logró separar a los animales del cuerpo.
Los testigos llamaron a la Policía para que puedan apersonarse hasta el lugar y socorrerlo pues aún se encontraba con vida en ese momento. Los uniformados, acompañados de una ambulancia, llegaron inmediatamente y lograron ingresar a la vivienda después de realizar un disparo al aire para ahuyentar a los perros.
La División de Homicidios trasladó al occiso hasta la morgue de la Pampa de la Isla para que sea sometido a una autopsia de ley.
Mario Leaños, manifestó que los dos pitbulls ya habían atacado anteriormente a unos perros de la zona, y esa situación de peligro su hermano desconocía cuando intentó visitar a sus sobrinos.
“Él estaba bien, no estaba enfermo de nada. Es una noticia que me duele en el corazón”, expresó.
Los vecinos de la zona exigen que sacrifiquen a los perros, porque son un peligro constante. Agencias