A pesar de que hoy somos más conscientes del riesgo de ingerir demasiados dulces, aún quedan muchos mitos sobre el azúcar y sus efectos reales. Después de todo, pensamos que es solo un carbohidrato más y siempre ha habido azúcar en la dieta. En parte es cierto, pero el problema es que llegamos a cuadriplicar la cantidad recomendada.
Tensión alta y desarrollo de enfermedades cardíacas
Un exceso continuado de glucosa en sangre puede conducir a un aumento de la presión arterial. Este proceso se puede llegar a hacer crónico si no controlamos los niveles de glucosa en sangre, por lo que el sistema cardíaco se podría acabar resintiendo. El hecho de controlar los niveles de azúcar en sangre resulta beneficioso para reducir el riesgo cardiovascular, de acuerdo con una publicación realizada en la revista Journal of the American College of Cardiology.
Aumento de peso
Como señalábamos, los efectos negativos del azúcar en el cuerpo y en el cerebro se producen con los snacks y productos industriales, que tienen muchas grasas saturadas y, por tanto, muchas calorías. Comer dos o tres chocolatinas en un día podría equivaler a la cantidad de calorías que deberíamos ingerir a lo largo del toda la jornada. Es necesario destacar que mantener un peso corporal adecuado reduce el riesgo de enfermar y evita complicaciones. El consumo de carbohidratos de alto índice glucémico está muy ligado a la ganancia de grasa subcutánea. También el hecho de incluir en la dieta alimentos ricos en edulcorantes artificiales podría ser capaz de generar este efecto, debido a las alteraciones sobre la microbiota intestinal que estos provocan.
Problemas dentales
Un exceso de azúcar puede dar lugar al desarrollo de caries y otros problemas en los dientes, pues las flora bacteriana de la dentadura puede sobrealimentarse con este nutriente, proliferando en exceso y dando lugar a los problemas dentales mencionados anteriormente.
Complicaciones metabólicas y adicción
Los azúcares, como muchos otros compuestos, son utilizados por las células para funcionar. Un exceso de azúcares puede conducir a un aumento de las reservas en forma de grasas, que pueden conducir a alteraciones metabólicas, según un estudio publicado en la revista The Journal of Clinical Investigation. De hecho, este es uno de los motivos por el que la gente desarrolla adicción a este compuesto.
Además, a nivel cerebral puede alterar los niveles de determinados neurotransmisores. Es el caso de la dopamina, una sustancia química relacionada con la recompensa. Aparece para producir placer después de una acción. Esta es la razón por la que cuanto más azúcar consumimos, más necesitamos. La mente comienza a producir dopamina cuando comemos alimentos con este elemento, casi en exclusiva. En este sentido, nuestra capacidad para sentir alegría disminuye y aumenta el riesgo de padecer depresión. No se trata, pues, de un carbohidrato más.
Regular el aporte de azúcar para mejorar la salud
Es fundamental que retiremos de la dieta habitual los alimentos procesados con azúcares añadidos. Estamos hablando de la diferencia entre empeorar la salud de manera paulatina o no. Como todo, la virtud reside en el equilibrio. Recuerda la necesidad de priorizar el consumo de alimentos frescos frente al de productos industriales. Estos últimos cuentan con mayores cantidades de carbohidratos, de grasas de tipo trans y de aditivos. Además es necesario complementar la dieta con la práctica de ejercicio de forma habitual. De este modo se consigue aumentar la sensibilidad de las células del organismo a la insulina, reduciendo el riesgo de desarrollar enfermedades metabólicas a medio y largo plazo.