El verano se aproxima y una de las principales actividades que se hacen en este momento podría cambiar debido a la pandemia de coronavirus, ¿cómo es que las actividades acuáticas se verán afectadas y qué tan seguro es meterse al agua en estos momentos?
De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, no existe evidencia de que el SARS-CoV-2 se pueda contraer en piscinas, jacuzzis, parques acuáticos y en grandes cantidades de agua como ríos y mares.
Sin embargo, las actividades realizadas en estos lugares deben tener medidas precautorias similares a las de otros sitios públicos.
Una de las principales medidas es seguir practicando la distancia social recomendada de 6 pies, así como evitar la agrupación de personas en eventos, juntas o reuniones dentro y fuera del agua si no es posible mantener la distancia.
Las piscinas públicas, al igual que otros negocios, deben contar con los artículos necesarios para asegurar la higiene de las personas, como jabón y gel antibacterial, además de que las superficies que sean de contacto común, como sillas y mesas, deben ser desinfectadas constantemente.
Al momento de nadar, es importante no compartir objetos personales como flotadores, googles y otro tipo de equipo acuático, ya que muchas personas podrían ser asintomáticas y expulsar partículas con el virus al hablar.
El sitio HuffPost publicó que el personal que labora fuera del agua en las piscinas y que estará en constante contacto con otros deberá usar mascarillas de tela, aunque dentro del agua no se recomienda el uso de estos accesorios, ya que pueden dificultar la respiración.
El agua de piscinas públicas y parques acuáticos contiene una cantidad de cloro que desactivaría el virus, por lo que es seguro nadar en estos espacios, mientras que en ríos, lagos y mares existe un efecto de dilución que prácticamente imposibilita que haya una dosis infecciosa.
Además de estas recomendaciones para evitar el contagio de coronavirus, no deben perderse de vista otros problemas y riesgos que podrían existir al realizar actividades acuáticas, como el ahogamiento.