Un total de 27 pilotos bolivianos corrieron el Dakar entre el 2014 y 2018, pero ahora el único competidor que participará es Daniel Nosiglia en la categoría motos. El factor económico es clave para que los nuestros pilotos se hayan alejado del Dakar.
“La inscripción para motocicletas cuesta 20.000 dólares; la asistencia, soporte mecánico, llantas, accesorios y otros suman alrededor de otros 20.000 dólares. El alquiler de la moto está rondando los 15.000, pasajes unos 3.000, seguros otros 3.000, durante la carrera se precisa accesorios de navegación por unos 1.000 dólares, adicional la hotelería para los días que no hay competencia, antes y después de la carrera”, refirió Fuentes.
A todos esos gastos se tiene que sumar la preparación previa al Dakar. En el caso de Fuentes corría en Marruecos, Argentina y Chile, y que tomar parte en esas tres carreras le llegaba a costar cerca de 40.000 dólares. Agencias