Todos los deportes se han visto obligados a adaptarse a la pandemia, en la mayoría eliminando la presencia de espectadores y aislando a los protagonistas. Pero en la National Football League (NFL) han ido un poco más lejos y decidieron implementar nuevos elementos para evitar la propagación del COVID-19 durante la actividad: se usarán cascos anti-coronavirus.
Un grupo de ingenieros ha trabajado en estos nuevos modelos que han sido avalados por los médicos de la liga profesional de fútbol americano y por la Asociación de Jugadores. La firma Oakley, fabricante del producto, comenzará a distribuir estos nuevos cascos. Se trata de un plástico transparente con hendiduras o agujeros que bloquean cualquier camino directo de una gota, pero que a su vez promueven el flujo de aire, la comunicación y las ondas de sonido.