El delantero brasileño se pierde el resto de la temporada con el PSG, donde este equipo ha sumado una nueva decepción en Europa. La enésima tras su llegada en 2017.
Sigue marcando ese récord de fichaje más caro de la historia. Los 222 M€ abonados por el PSG para pagar su cláusula de rescisión y sacarlo del FC Barcelona en 2017 parecen ya complicados de alcanzar. A menos a corto plazo a tenor de la crisis que asola a muchas escuadras tras la pandemia y sus restricciones, que impactaron de lleno en la industria del fútbol.
Neymar ha sido la apuesta más costosa de la entidad parisina. Aunque a la larga Kylian Mbappé fuera su jugador más diferencial y Lionel Messi quizás el fichaje más impactante en 2021. Pero el caso es que seis años después se han venido repitiendo ciertos patrones que colocan a la entidad francesa en un continuo «Día de la Marmota» para vender a Neymar al mejor postor. Agencias