Grupos de mujeres encubiertas llenaron la sala del Concejo Municipal y permanecieron allí para gritar, insultar e interrumpir a concejales opositores durante la elección de la nueva directiva, convirtiendo la sesión en un modo bochornoso de iniciar una nueva gestión en el legislativo municipal.
La elección del concejo se realizó en horas de la mañana de este martes tal y como fue anunciado en pasados días. El proceso se desarrollaría con total normalidad hasta que llegaron grupos de mujeres que, con el rostro cubierto con gorras, sombreros o barbijos, se apostaron en el salón adjunto al pleno del Concejo y desde allí, espectaban el desarrollo de esta actividad.
La alineación de estos grupos fue bastante clara, aplaudiendo y vitoreando a los concejales de la bancada SUMATE y abucheando a los opositores del MAS.
El primer cargo a ser elegido fue la presidencia del Concejo, que recayó en el concejal Diego Murillo, personaje sobre quien recayeron denuncias por acoso político y agresiones dentro del concejo. Obtuvo un total de 7 votos a favor, 3 en contra y 1 abstención.
En la vicepresidencia, se encuentra nuevamente el concejal Joel Flores, quien sorpresivamente, la pasada gestión, dejó de lado la bancada del MAS para afianzarse más al oficialismo desde el año pasado, cuando colaboró para elegir a Marcela Vidaurre como presidenta durante la crisis por la nueva directiva. Su designación fue reprochada por los tres concejales del MAS, quienes aseguraron que querían a Silvia Soliz en el cargo. Ante este reclamo, empezó el abucheo, insultos, gritos y bullicio de los grupos enmascarados, quienes trataron de acallar la intervención de los concejales.
«El alcalde ha debido poner muchos esfuerzos, tal vez de color verde para que toda esta gente venga a hacer este show», infirió la concejal Escarlen Terrazas en referencia a la presencia de estos grupos.
«Ya se oía venir que iban a armar grupos de choque entre algunos malos dirigentes, entre algunos malos comerciantes, personas que tienen pues familiares trabajando en la alcaldía», continuó la concejal asegurando que la situación económica del país: «seguramente obliga a muchos de ustedes a estar el día de hoy aquí con barbijos ocultando su identidad».
Además, le reprochó a la concejal Claudia Flores su reconciliación con SUMATE pese a que la pasada gestión fue agredida por grupos afines durante la crisis en el concejo.
«Me da mucha pena, no pena, lástima, que todavía existan mujeres sin dignidad, sin orgullo y sin palabra», concluyó Terrazas.
Claudia Flores fue designada en la Secretaría del Concejo y de esta manera, se dio por cumplido el objetivo de tener una nueva directiva en esta polémica sesión.
Al finalizar este evento, la concejal Daniela Cabrera lamentó que la sesión se haya realizado en medio de estos gritos e insultos por parte de los grupos encubiertos.
«Espero que pueda realizar una mejor gestión que el año pasado, que se nos pueda entregar toda la documentación y que el concejo no se convierta en un adorno más del alcalde municipal, sino que realmente cumpla con sus funciones de fiscalización», dijo Cabrera respecto a la nueva directiva.
Los tres integrantes de la bancada del MAS, aseguraron que se presentó una impugnación antes del inicio de esta sesión por irregularidades que habrían detectado y que no serían pasadas por alto.