Usar cloro “así sean solo 5 gotas” para “desinfectar las verduras o alimentos o utensilios que se usan para cocinar” puede causar, entre otros, daños en el hígado y los riñones, afirma el texto viralizado en Facebook.
“Al desinfectar las verduras o alimentos o utensilios que se usan para cocinar o comer, pues ellas quedan impregnadas con el cloro aunque sean enjuagadas, dado que el cloro penetra la fibra de las verduras o frutas o lo que sea”, continúa.
La información es atribuida a una doctora de apellido “Luchelli” que supuestamente practica la medicina antroposófica, una escuela de medicina alternativa. Una búsqueda en Google por los términos “Dra. Luchelli” y “Antroposófica”, no arrojó resultados de ningún profesional de la salud con este apellido.
Según el doctor Ubier Gómez, toxicólogo del hospital de San Vicente Fundación en Medellín, “es seguro” agregar cloro al agua para desinfectar alimentos como frutas y verduras. Según el especialista, la manera correcta de hacer este proceso es “sumergir los alimentos [en la solución de cloro y agua] durante 5 minutos y luego enjuagar con abundante agua”.
Un documento con “recomendaciones de alimentación y nutrición”, publicado por la Universidad Nacional de Colombia, recomienda diluir 20 gotas de cloro en un litro de agua para obtener una solución desinfectante segura para alimentos y superficies.
La publicación viral incluye la imagen de un producto desinfectante de la marca mexicana de cloro Cloralex. Según explica Gómez, esta y las demás marcas de cloro que se encuentran en un supermercado contienen hipoclorito de sodio, un compuesto que al entrar al cuerpo “se junta con el dióxido de carbono y el agua circulante” para finalmente transformarse “en hidrógeno y cloro, constituyentes normales de la sangre”.
A pesar de ser un desinfectante eficaz, la nutricionista Narda Molina, coautora del documento con recomendaciones de alimentación y nutrición durante la pandemia, publicado por la Universidad Nacional de Colombia, detalló que el cloro tiene la desventaja de “marchitar frutas y verduras delicadas”.
La publicación viral también alerta acerca del “olor” del cloro pues “también penetra al sistema respiratorio y al sistema nervioso por vía olfatoria (…) eso hace un efecto de acumulación que daña (sic)”.
Pero el toxicólogo Gómez asegura que no es cierto que el cloro se acumule en el cuerpo por la vía respiratoria, aunque en algunos casos sí puede llegar a generar problemas: “su inhalación en un lugar cerrado, durante varios minutos, puede ser irritante pulmonar, generando tos y dificultad respiratoria”.
Aunque expertos y autoridades coinciden en que es seguro usar cloro diluido en agua en bajas concentraciones para desinfectar superficies y alimentos, la OMS advierte que ingerirlo “puede ser muy peligroso” y llegar a provocar irritación en la piel y los ojos, o envenenamiento.
En este sentido, Rubén Hernández, presidente de la División de Farmacéuticos Clínicos de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva, explicó que aunque la toxicidad ocasionada por la ingesta de cloro “depende de la concentración”, su principal efecto es la “irritación de la mucosa esofágica y gástrica”. En el caso de la irritación que se genere en la piel “también depende del tiempo de exposición y concentraciones”.
ALTERNATIVAS PARA LA DESINFECCIÓN DE ALIMENTOS
1. AGUA OXIGENADA (PERÓXIDO DE HIDRÓGENO)
Para definir un desinfectante, explicó Natero, hay que tener varios aspectos en cuenta: su capacidad para desinfectar, el tiempo que requiere, que no produzca daño, que no deteriore al alimento, su costo, cuán accesible es.
“Las publicaciones plantean que [el agua oxigenada] se puede usar, pero hay otras metodologías más efectivas y hay algunos alimentos en los cuales el peróxido de hidrógeno puede dañar la calidad, como las frutillas o los hongos”, detalló la nutricionista y anotó que además, el agua oxigenada es más costosa que el hipoclorito de sodio.
2. AGUA, SAL Y BICARBONATO
Por su parte, la nutricionista Molina sostuvo que el bicarbonato disuelto en agua sí sirve para desinfectar alimentos: “El bicarbonato además de desinfectar, no deteriora los alimentos y no se conoce ningún efecto dañino en la salud”, señaló. Esta misma solución aparece en el libro de recomendaciones para desinfectar alimentos publicados recientemente por la Universidad nacional de Colombia, antes mencionado.
Molina considera que no es “necesario” agregar sal a esta solución: “la sal se ha usado desde hace muchos años para conservar, pero hay organismos que sobreviven a concentraciones altas”.
3. VINAGRE DE ALCOHOL
La publicación propone otra solución con vinagre de alcohol, que tiene efecto desinfectante: “1 litro de agua con 1 cucharada (de postre) de vinagre de alcohol”.
Algunos estudios plantean que es posible desinfectar alimentos o eliminar algunos patógenos con vinagre. La nutricionista Molina afirma que el vinagre sí puede ser usado en la desinfección de alimentos “pero se necesitarían concentraciones muy altas, una taza o 250 mililitros por litro de agua”, para que tuviera efecto.
Además, la publicación aconseja “hacer gárgaras y hacer inspiraciones por la nariz con esta agua y luego eliminarla”, algo que, advierte la profesora de farmacéutica Correa, “podría causar una neumonía química”, es decir, una inflamación en los pulmones por inhalar compuestos irritantes.
Finalmente, la publicación aconseja agregar “un poquito de *bicarbonato o de vinagre o de limón” al momento de lavar la ropa ya que “estos preparados no sólo desactiva (sic) el virus, sino que cambian el terreno para que no puedan vivir tanto virus como bacterias e impide la reproducción al alcalinizar el medio”.
Según la farmacéutica Correa, “es errado” afirmar que esta mezcla tiene la propiedad de desactivar el nuevo coronavirus. La especialista detalló que la mezcla con vinagre sí podría “eliminar ciertas bacterias por cambio de pH”, pero no tendría ningún efecto contra el virus.