Las declaraciones de la exministra se viralizaron en redes sociales, donde se considera que admite que hubo una alteración en los datos de los comicios de 2019, que fueron anulados tras un informe de la OEA que evidenció irregularidades. Algo similar le ocurrió a su candidato, Luis Arce, cuando dijo: “sí, claro que sí (hubo fraude)”.
La exautoridad sostiene que “a la fecha (el TSE) no le ha mostrado al pueblo boliviano si el sistema de conteo rápido tiene certificación internacional como la que tenía el sistema de conteo del año pasado”, tampoco “cuáles son las diferencias que ha mejorado este sistema de conteo a diferencia del año pasado; si se muestran los resultados por actas y con las fotografías; si se muestra los resultados por mesa o recinto; no nos han demostrado cómo va a funcionar ese sistema”.
También negó que el MAS esté detrás de los hechos violentos que se registran en algunas regiones del país, como parte de la campaña. Afirmó que existen otros frentes que quieren hacer parecer que el “instrumento político” ocasiona las agresiones.
“En otros casos están plantando situaciones que hacen parecer que el MAS es el que provoca violencia. El MAS no es violento por naturaleza, el instrumento político tiene vocación democrática y pacífica, y eso es de siempre, y así lo hemos demostrado”, enfatizó Paco.
Concluyó denunciando ante la comunidad internacional que “está en curso nuevamente un segundo golpe a la democracia”, porque “no tenemos transparencia desde el Tribunal Supremo Electoral”, a tiempo de deplorar que desde el Gobierno se vulnere los derechos de la población. Agencias