Álvaro Torres Nina y lo que le paso es un misterio que tiene con el corazón roto a su familia y a toda la zona sur, ya que un día salió de su casa y apareció en terapia intensiva del Hospital del sur.
Por meses sus padres peregrinan buscando respuestas sin encontrar nada claro que les dé paz, entre las hipótesis que se manejan sobre el caso están que pudo haber sufrido un atraco violento, que pudo ser golpeado o víctima de un hecho de tránsito.
LA INCERTIDUMBRE
A la fecha sus padres no saben con exactitud qué fue lo que le paso y lo último que lograron indagar es que una vagoneta tipo taxi ingresa a dicho hospital donde lo deja a su suerte.
El joven salió de su casa el pasado 20 de junio y perdió la vida este pasado jueves en terapia intensiva del Hospital Viedma, donde fue referido por la gravedad de su fractura de cráneo.
“Como papá, un poquito consternado, dolido por lo que ha sucedido con mi hijo y la verdad es que quiero saber realmente que es lo que ha pasado”, manifestó Wilson Torres a Diálogo la Red Educativa.
Su cuerpo es velado en su domicilio de la zona sur de Cochabamba, donde vecinos, amigos y su familia se reunieron para clamar justicia para Álvaro.
Según manifestaron con anterioridad sus padres, su hijo salió de su casa un día con un monto de dinero y el objetivo de comprarse una cama en el centro de la ciudad, pero por varios días no supieron nada de él, hasta que lo encontraron internado en el Hospital del sur.
“Mi hijo ha salido el 20 de aquí de la casa y le han encontrado a las siete de la mañana, le ha llevado una persona, su amigo, sin referencia, lo ha dejado en el hospital como NN, sabiendo muy bien el que le conocía…ni él se ha identificado al hospital, ese informe tengo del hospital del sur”, agregó su padre.
Cuestionan que el nosocomio no contara con cámaras de seguridad o recabaran información de quien dejó a su hijo en ese lugar.
LA INVESTIGACIÓN
Entre su búsqueda dieron con un “amigo” de su hijo que les dio una versión que fue descartada, él les contó que fueron atacados por un grupo de personas en situación de calle en inmediaciones de la terminal de buses, pero también presento contradicciones en su versión.
“Hay una persona yo lo llamo como culpable, él ha estado con el ese día…él dice que ha pasado por la terminal, los han agarrado los cleferos, los han hecho el daño y él dice que al él también le han hecho daño, le han roto el brazo le han fracturado, se contradice”, agregó el padre.
Asegura que varias veces fueron al lugar, pero no encontraron rastros de sangre, que se detuvieron personas, pero que finalmente efectivos policiales descartaron esa versión.
Según el padre, esa persona ya salió del país y se encuentra en Brasil, lo que dificulta aún más saber la verdad.
UN BRILLANTE FUTURO QUE SE APAGÓ
Su familia recuerda a Álvaro como alguien estudioso, bueno en las matemáticas, que soñaba con ser alguien en la vida y que este año saldría bachiller.
“Era un joven estudioso, era buen matemático, mi hijo, sus mayores estudian, están en la universidad, estudian mis hijos, no son hijos de la calle”, agrega entre lágrimas.
Los padres se sienten impotentes al no saber la verdad y aseguran que él, “no se merecía esa muerte”.
CLAMAN JUSTICIA
El velorio de Álvaro se desarrolló entre gritos pidiendo justicia y exigiendo a autoridades esclarecer su muerte.
“Aquí en Bolivia no encontramos justicia para los que somos de esta sociedad, pero los que tienen plata pagan, me duele bastante…hasta cuando nosotros vamos a vivir así…pedimos justicia, señores policías, movilícense, no se queden ahí”, pidió una vecina.