Estudiantes de medicina la matan y sacan los ojos

La búsqueda del comprador de los ojos de Dubraska Andreína Rivas se intensifica meses después de su trágico asesinato. La joven, llena de alegría por haber comenzado sus estudios universitarios, interrumpió su jornada laboral tras recibir una invitación para encontrarse con una pareja de conocidos.

Sin embargo, su encuentro con ellos resultó en un desenlace aterrador. Después de 16 horas de su desaparición, su cuerpo fue encontrado en el río Motatán, pero lo que desconcertó a todos fueron los cortes quirúrgicamente precisos en sus ojos, indicando un macabro motivo detrás de su muerte.

El director nacional del CICPC, comisario general Douglas Rico, reveló que los ojos de Dubraska fueron extraídos con la intención de venderlos por un valor de cien dólares.

La noticia se propagó rápidamente en las redes sociales y los medios de comunicación, generando conmoción y alarma en la comunidad de Trujillo. Los implicados en el homicidio llevaron las pertenencias de la víctima a su casa, afirmando desconocer su paradero, lo que levantó sospechas entre los familiares y desató una desesperada búsqueda.

La posibilidad de que estos órganos fueran destinados a actos de brujería ha surgido como una hipótesis, aunque no se descartan otros motivos. Mientras tanto, la incertidumbre crece y los trujillanos exigen respuestas sobre este escalofriante hecho que ha generado un impacto profundo en la sociedad.

Un tribunal de Venezuela condenó a 20 años de prisión a dos jóvenes, el estudiante de medicina José Gregorio Hernández Vargas (19) y Kleiver Omar Linares Rondón (21), por el asesinato de Dubraska Rivas de 31 años a la que “le sacaron los ojos” en el estado Trujillo (oeste), informó este lunes el Ministerio Público (MP, Fiscalía). Los sentenciados admitieron su responsabilidad en el feminicidio, ocurrido el pasado 22 de mayo en el municipio Valera, la principal ciudad de esa región andina.

Ese día, explicó el MP en una nota de prensa, “ambos agresores” fueron a un río con la víctima, de 31 años de edad, y “le causaron la muerte con un arma blanca”. Para extirparle los ojos y venderlas en el mercado negro. Agencias