«Familia de delincuentes» mató a un guardia de 17 años

José Luis T.S. de 17 años de edad, era un adolescente que trabajaba para ayudar económicamente a su familia, pero perdió la vida trágicamente luego de recibir una puñalada en el pecho.

José Luis, su hermano mayor y un amigo cumplían sus rondas vigilando las casas de Cerro Verde para brindarles seguridad y evitar robos que se habían hecho frecuentes. Los tres guardias fueron contratados por dirigentes y apenas cumplirían una semana en el trabajo. 

“A los tres les habíamos botado donde estábamos trabajando y ahí abajo habían robado aparte en la 6 de agosto…nuevamente han vuelto a subir, una hora antes estaban tomando ahí en la calle y les dijimos que se retiren porque no pueden tomar en vías públicas”, relató su hermano a la Red Unitel.

Durante su turno desalojaron a tres personas que se encontraban bebiendo por la zona, pero al promediar las 04:30 de la madrugada de este jueves, Marcelo A. H., Alejandro A. H. y Bacilio A.A. volvieron armados para atacar a los guardias.

“Se aparecieron tres personas con cuchillo (de carnicero) directamente a atacarnos a los guardias de seguridad y le habían apuñalado a mi amigo…estábamos haciendo ronda y directamente han venido a atacarnos”, aseguró el tercer guardia.

Según relató su hermano, el ataque iba hacia él, pero su hermano menor lo salvó, “yo creo que a mí me iba a apuñalar, pero yo me he hecho atrás y directamente mi hermano ha llegado con el otro guardia y ahí se han empezado a alterar”, agregó.

Tras el ataque lograron detener a uno de los implicados, sus cómplices escaparon y de inmediato auxiliaron al menor hasta una clínica particular; sin embargo, perdió la vida.

Se presume que la causa de muerte fue un shock hipovolémico provocado por la herida en el pecho por la puñalada.

El primer detenido fue llevado a dependencias policiales y en su poder se encontró un cuchillo que se presume fue el arma homicida.

LA CAPTURA

Según informó el Comandante departamental de la policía, Cnl. Erik Holguín, los efectivos de inteligencia de la policía se despegaron de inmediato y tras identificar a los dos complices, lograron dar con su paradero.

“Destacar el trabajo que ha realizado los grupos de inteligencia de la policía boliviana, y es a través del CEIP que se logra la ubicación y verificación de los otros dos sujetos que se encontraban prófugos…el señor Alejandro A.H. y del señor Basilo A.A. estos dos fueron encontrados en diferentes lugares”, informó.

Los implicados en el homicidio son integrantes de una familia, dos son hermanos y el tercero es su sobrino, uno fue encontrado en un domicilio de Cerro Verde y otro en la zona de Primero de Mayo.

La muerte fue esclarecida en cuestión de horas, los aprehendidos fueron remitidos al ministerio público, esperan su imputación formal y posterior audiencia cautelar.

SUEÑOS QUE SE APAGAN

La familia de la víctima aguardo por varias horas su cuerpo en puertas del IDIF para llevárselo y darle cristiana sepultura, entre lágrimas su madre contó que su hijo menor había decidido trabajar con su hermano para ayudarlos con los gastos como el alquiler.

“Eso es lo que estaba haciendo, ayudarnos para mantener yo vivo en alquiler, no es mi casa nada, él ha dicho voy a trabajar, mami les voy a ayudar y por eso ha ido a trabajar…Me duele que esté ahí adentro así, a quien no le va a doler, es mi hijo…tengo un dolor grande, un vacío grande en mi corazón…una persona inocente ha perdido la vida, no es un maleante ni nada”, aseguro.

La familia pide justicia por el futuro que le arrebataron en cuestión de segundos, “tenía una vida por delante, tantos deseos que tenía él, pero lamentablemente le han apagado todos sus deseos toda su vida, solamente pido justicia, que se haga justicia, entran a la cárcel y salen ellos como si nada”, lamentó.

Su velorio fue instalado en horas de la tarde y su familia lo recuerda como un joven alegre, estudioso y trabajador.