Familiares, amigos y vecinos de Eduardo C. de 28 años de edad, velaron sus restos en su vivienda ubicada en el municipio de Capinota, entre lágrimas de impotencia y pedidos de justicia.
“Quiero que investiguen la policía, yo pido justicia para mi esposo por mis hijos, él nos mantenía, ahora quiero justicia para mi esposo”, pidió entre lágrimas su viuda.
El hecho se registró durante el fin de semana cuando asistieron a una fiesta de wallunk’a en una chichería y tras una pelea con tres hombres, uno de estos lo apuñaló con un cuchillo segándole la vida.
Según explicó uno de los responsables del lugar, cortaron la luz porque se acabaron las bebidas alcohólicas y algunas personas comenzaban a pelear, pero no imaginaban que algo así podría pasar.
Por el hecho de sangre, dos personas fueron detenidas y el autor material continúa prófugo.