Tuvieron que matar al animal para calmar el feroz ataque. La tenencia y crianza de los perros de la raza pitbull volvió a ponerse en tela de juicio debido a su alta peligrosidad. El martes pasado, una niña de dos años fue rescatada por su padre de morir masticada por un pitbull.
Hugo Pecho de ocupación cantante relató que se encontraba en la sala de su vivienda y descuidó a su hija quien salió por momentos a jugar al patio.
Al poco rato, escuchó los gritos de su bebé y al salir su perro la tenía sujetada de la cabeza y bañada en sangre sin querer soltarla. “Al intervenir noté que mi perro no quería soltarla y la tenía mordida de la cabeza y al intentar separarlos, me acabó mordiendo las manos”, afirmó Pecho. Los vecinos y otros familiares tuvieron que intervenir para rescatar a la menor y el padre tuvo que optar por ejecutar al animal para preservar la vida de su hija.
La niña tuvo que ser evacuada de urgencia hasta el hospital de Niños Mario Ortíz, donde fue intervenida quirúrgicamente. En tanto el padre de la niña tuvo que ser suturado de las mordeduras de su animal en ambas manos y una posible fractura.
El médico del hospital de Niños Freddy Rojas, informó que las heridas en la paciente fueron profundas y requirieron una cirugía. “Se le aplicó una vacuna antirrábica y se suturó sus heridas. La zona más afectada fue el cuero cabelludo de la cabeza pero la menor esta estable y fuera de peligro”, valoró el médico. El Día