FIFA y la OMS dan las directrices para volver al fútbol

La FIFA, la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Asociación de Clubes Europeos (ECA), FIFPRO, el Foro Mundial de Ligas de Fútbol y European Leagues elaboraron un documento de consideraciones médicas y un instrumento de evaluación de riesgos para facilitar que se reanuden las competiciones tras el parón obligado por la pandemia de coronavirus.

DETALLES DEL PROTOCOLO

– Supervisar todos los casos positivos de COVID-19 y seguir el rastro de todos los contactos para detectar y evitar el contagio.

– Gestionar todos los casos de forma eficiente, con suficiente capacidad del sistema sanitario, respiradores y personal.

– No se puede jugar al fútbol mientras se apliquen las medidas más estrictas de la pandemia (es decir, durante el confinamiento).

– Las regiones/federaciones con un número de casos reducido podrán suavizar las restricciones de forma escalonada y estratégica.

– El distanciamiento físico y el aumento de las medidas de higiene seguirán aplicándose a largo plazo.

– Se harán evaluaciones de riesgos y se establecerán procedimientos de mitigación con antelación, los cuales se actualizarán periódicamente y se activarán cuando corresponda, siguiendo el consejo de la FIFA y la OMS.

LAS MEDIDAS PARA LLEVAR A CABO LA PRÁCTICA

1. Higiene y distanciamiento (tanto en los entrenamientos como en la competición, incluidos instalaciones de entrenamiento y estadios):

– Mantenerse informado de las directrices válidas en cada momento que impartan las autoridades locales y nacionales, la OMS y los órganos rectores del fútbol según se desarrolle la situación del coronavirus. Estas incluyen las recomendaciones en materia de salud pública y las directrices para controlar y prevenir la propagación del virus.

– Respetar la distancia entre personas: al menos 1 metro.

– Instar a mantener una buena higiene.

– Lavarse bien las manos; usar desinfectante de manos.

– Evitar tocarse los ojos, la boca y la nariz.

– Toser o estornudar en un pañuelo o en el hueco del codo, cubriendo la boca y la nariz.

– Tirar los pañuelos en un contenedor sellado.

– Desinfectar el equipamiento deportivo regularmente, así como las zonas por donde más personas pasen;

– Evitar compartir el equipamiento deportivo como, por ejemplo, las botellas de agua;

– Contar con estrategias para limitar el contacto/interacción. Por ejemplo, en un edificio, establecer caminos de dirección única y mantener las puertas abiertas.

-Evitar darse la mano, chocar los cinco y cualquier otro contacto físico.

– Planificar las actividades futbolísticas para incluir a personas con necesidades sanitarias concretas. Evitar que dichas personas hagan ejercicio vigoroso continuado a menos que los profesionales médicos indiquen que es seguro.

– Dormir y comer de forma adecuada.

2. Realizar test y seguimiento cuando sea necesario

– Hacer un seguimiento de cerca de los participantes para advertir síntomas típicos de la gripe, aislar a los afectados y contactar inmediatamente con el médico en caso de detectar afecciones respiratorias.

– Implementar las medidas de protección recomendadas, incluidos chequeos médicos diarios (desde la exploración para detectar síntomas respiratorios o fiebre hasta la prueba de laboratorio de la COVID-19).

– Realizar pruebas específicas del sistema respiratorio, cardiaco y músculo-esquelético, según indicaciones de los profesionales sanitarios, en función de la disponibilidad, la exposición al virus, la capacidad económica y el nivel de la competición.

– Realizar el test de la COVID-19 a todos los futbolistas que regresen al fútbol profesional para proteger y reforzar la confianza y salud mental dentro del equipo y en torno a él.

a. El primer test se realizará 72 horas antes de reanudar la actividad futbolística para evitar los falsos negativos (personas asintomáticas portadoras del virus).

b. El segundo test se realizará antes de la primera sesión de entrenamiento.

c. Después se harán pruebas a los participantes del fútbol, ya sea en casa o en los lugares indicados en los clubes por los médicos.

– Desinfectar los medios de transporte utilizados para acudir a partidos o entrenamientos.

– Desinfectar el lugar de alojamiento, los sitios donde se preparen las comidas y los canales de distribución.

– Trabajar con el personal mínimo para reducir el riesgo de contagio.

– Aplicar y mantener las medidas de distanciamiento físico. El documento también aclara que el consenso “solo” es para cuando los países o regiones se hayan hecho del control de la transmisión del virus, y únicamente entonces, será apropiado empezar a practicar deportes de equipo, a nivel profesional y amateur.