El director de cine boliviano Kiro Russo obtuvo ayer el Premio Especial del Jurado de la sección Horizontes de la 78° edición del festival de cine de Venecia, con “El gran movimiento”, una película experimental sobre la vida en la capital de su país.
“Gracias, gracias. Agradezco a los trabajadores y trabajadoras que son los verdaderos protagonistas de mi filme”, aseguró emocionado Russo al recibir el premio durante la ceremonia de clausura en Venecia.
La segunda película del director boliviano, después de “Viejo Calavera” (2016), fue rodada en 16 mm, en diferentes lugares de La Paz para seguir la vida de Elder, un joven minero, y Max, un vagabundo.