La administración del presidente Luis Arce suspendió mediante decreto supremo el cobro de intereses adicionales por el diferimiento de créditos y dispuso su devolución en caso de que el prestatario haya reanudado su plan de pagos. También estableció el refinanciamiento y la reprogramación de los créditos para los prestatarios que así lo soliciten.
“Nuestro decreto supremo establece los montos que se estaban computando como intereses adicionales, (los cuales) se suspenden, no se van a cobrar. Y ello porque no es correcto, (porque) hubo una mala aplicación del diferimiento. La ley fue estricta con la idea de que las cuotas, tanto capital como interés, queden congeladas y no surta ningún interés extraordinario”, explicó este jueves el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro.
El martes, la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) descartó un nuevo diferimiento en el pago de créditos y advirtió que los saldos impagos “continúan devengando intereses”, por lo que pidió a la gente que, a partir de enero del próximo año, empiece a honrar sus obligaciones crediticias.
“Si uno retoma cuanto antes el pago de sus obligaciones, obviamente” tendrá “menos carga de intereses por mantener las deudas de capital impagas”, afirmó entonces el secretario Ejecutivo de Asoban, Nelson Villalobos. Agencias