Los comerciantes cumplieron con medidas de presión reclamando la situación económica y el precio del dólar en el mercado paralelo, protesta a la que otros sectores se sumaron.
Las movilizaciones iniciaron con el cierre de mercados donde la mayor parte de los puestos estaban cerrados.
“Están siendo parte de los mercados centrales, los mercados zonales y los todos los comerciantes de vías legalmente establecidos”, indicó Carlos Calcina, dirigente del mercado Calatayud.
Muy pocos puestos atendieron en la madrugada para luego cerrarse y unirse a la manifestación
“SAQUEO, SAQUEO”
Posteriormente, los gremiales se concentraron en la calle Punata y avenida San Martín, donde iniciaron con la marcha recorriendo diferentes calles de la ciudad.
A su paso, los comerciantes ingresaron a algunos centros de abastado donde se encontraron con algunos puestos abiertos y obligaron a sus afiliados a cerrar.
Entre gritos y empujones, varios comerciantes que atendían pese a la convocatoria guardaron sus pertenencias y mercadería para que esta no sea arrojada por las personas movilizadas.
Una situación similar se pudo observar en los negocios que se encontraban abiertos y atendiendo al público, a los cuales les forzaron a cerrar y sumarse a las movilizaciones del sector, quienes amenazaban con un “saqueo” para que dejen de atender.
EXCESOS
Dentro la movilización que protagonizaron los comerciantes de aproximadamente 30 centros de abasto se vivieron momentos de tensión, ya que algunas personas que participaban de la marcha reaccionaron de manera violenta contra comerciantes que se encontraban atendiendo al público pese a la convocatoria.
Tras el inicio de marcha, los comerciantes se acercaron a los negocios que se encontraban atendiendo, donde entre gritos y empujones los obligaron a cerrar y para que sumen a la medida de presión.
Se pudo observar como algunos productos eran arrojados al suelo por algunas personas, además, en una heladería en pleno centro de la ciudad se registraron varios amagues de enfrentamientos, ya que las sillas y mesas, incluso su mercadería, fue sacada por la fuerza hasta la calle.
Incluso una comerciante le lanzó una fruta a un camarero que intentaba levantar las cosas que eran arrojadas.
ULTIMÁTUM
Con la medida, los gremiales dieron un plazo de tres días al Gobierno para que atiendan sus demandas y la de otros sectores que se unieron para pedir una solución a la situación del dólar e incluso la falta de combustible.
“No es justo que este Gobierno nos esté mirando del palco, le estamos dando 72 horas a este gobierno para que nos reciban de una vez por todas”, indicó Wagner Rosales, dirigente gremial.
La Federación de Gremiales en Cochabamba advirtió al Gobierno nacional que, si en 72 horas no existen respuestas a sus demandas, bloquearán las principales calles de Cochabamba e instituciones del Estado de manera indefinida.
“Pedir al Gobierno que bote a esos ministros, a esos diputados ineptos, incapaces, ¿Dónde están los nuestros representantes como diputados?. No hay compañeros, aquí como comerciantes estamos muriendo, las amas de casa ya no tienen que llevar al día a sus casas, todo lo de la canasta familiar están sobreprecios”, dijo otro dirigente.
La movilización finalmente llegó hasta la plaza principal donde se conformaron en un mitin de protesta.
“Por nuestros hijos, por la gente pobre, por todos compañeros, y tenemos que estar unidos aquí en nuestra lucha, compañeros. El dólar se ha doblegado, el Gobierno está de palco, mirándonos. ¿Qué solución nos da el Gobierno hasta ahora?”, agregó.
El sector asevera que no cuentan con recursos para la adquisición de nueva mercadería, por lo que sus ventas bajaron en los últimos meses a consecuencia de los altos precios.