Dos hermanas, Sara, de 39 y Esther, de 41, están desaparecidas hace más de una semana en Córdoba y sus cuerpos son buscados. Los jóvenes, de 24 y 29 años, son hijos de una de las mujeres y ambos trabajaban en un lavadero, según contó una vecina a Cadena 3.
En la casa vivían más de diez personas, entre adultos, adolescentes, niños y bebés. En la madrugada del pasado fin de semana vieron cuando los acusados prendieron una enorme fogata en el patio y aseguraron que el olor era nauseabundo.
Las personas que viven por la zona escuchaban rezos extraños y alabanzas. A su vez, revelaron que en esa casa se practicaban rituales satánicos y que en las ventanas se observaban imágenes de crucifijos no convencionales.
En el interior del domicilio, los investigadores encontraron palas, machetes, hachas y una maza que tendría manchas de sangre. No descartan que los cuerpos hayan sido desmembrados y arrojados al pozo. Agencias