Una mujer desesperada denunció que sus dos pequeñas hijas sufren de abusos sexuales por parte de su primo, un adolescente de 16 años, pero dichas denuncias no fueron tomadas en cuenta, debido a que el tío del acusado sería un funcionario de Quillacollo, pero además es el padre de las víctimas.
El caso ya se puso a conocimiento de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia para que tomen los actuados necesarios, pero a la fecha nadie la escucha y la madre teme a que sus pequeñas hijas sean víctimas de violaciones sexuales.
Dos hermanitas sufren abusos sexuales
La división de la familia sin duda alguna afecta a los menores del hogar, pues son expuestos a todo tipo de riesgo al compartir custodia de los menores.
Como en este caso, donde dos hermanitas de 8 y 10 añitos de edad viven el tiempo compartido con su progenitora y su padre. El progenitor el tiempo que le toca estar con las niñas corresponde a la ciudad de Cochabamba, pero como es un funcionario del Concejo municipal de Quillacollo, dejaba a sus hijas al cuidado de sus familiares que viven en Sipe Sipe, cuya familia tienen hijos adolescentes.
Uno de los primos aprovechando la ausencia de los mayores, obligaba a las menores a tocarle con sus dos manos sus miembros íntimos, además de rosearle sus partes de las niñas.
El primo, tocaba su cuerpito de las niñas, agresiones sexuales que se dieron en reiteradas oportunidades y que eran calladas porque el sujeto las amenazaba con pegarles si decían algo.
Víctimas rompen el silencio
La madre cuando tomó contacto con sus hijas, las menores con lágrimas en los ojos le contaron a su mamá que ya no querían estar con sus primos ni sus tías, porque les obligan hacer cosas que no quieren, pues con un dibujo relataron todo el abuso sexual que sufrían cuando estaban bajo el cuidado de su padre y que aun sabiendo la situación no toma las acciones correspondientes, ni tratándose de sus hijas.
El caso, continua en proceso de investigación, pues la madre anuncia que si no son escuchadas en dicho municipio llegarán a las instancias que sea necesario para tener justicia para sus pequeñas.