A pesar del crudo frío y la falta de espacio en los cementerios para enterrar a los fallecidos, un hombre de aproximadamente 40 años de edad que perdió la vida el pasado lunes, es velado por algunos amigos en puertas del cementerio general.
Según su amigo el occiso no tiene familiares en nuestro departamento y no hay quien se haga cargo del sepelio, sin embargo sus vecinos de la zona sur se acostaron para comprarle un ataúd para poder darle una cristiana sepultura.
No hay espacio en los cementerios
El occiso no murió por el Coronavirus, sino que tuvo un paro cardíaco y ni aún así pudo ser enterrado en ningún cementerio, ya que no existe espacio.
La pareja del occiso no se hizo cargo del cadáver ya que apenas empezaban a conocerse, fue así que sus amigos lo llevaron a puertas del cementerio general para velarlo, mientras les den un espacio para sepultarlo.
Sus amigos pidieron a las autoridades un espacio para enterrarlo ya que no podrán estar muchos días a lado del cuerpo, caso contrario tendrán que dejar el cadáver en la calle.