La mañana de este pasado viernes estudiantes de una unidad educativa de Sacaba tuvieron que ser evacuados de emergencia a diferentes hospitales luego de presentar síntomas como somnolencia, náuseas, debilidad y dificultad para hablar.
“Estaba mareado y pensábamos que era broma que se estaba fingiendo”, relató uno de los menores.
Al ver que el niño no podía hablar con claridad la profesora se alarmó y preguntó si había consumido algo, fue ahí que todo empezó, casi al mismo tiempo otros menores comenzaron a presentar malestares, mientras que sus compañeros los veían asustados.
En ese momento los maestros los evacuaron a hospitales de emergencia y los padres comenzaban a recibir llamadas alertándolos sobre el hecho.
“Me llamaron y me dijeron que estaba mi hija aquí en el hospital, en el centro Huayllani, yo he ido al centro y estaba mi hija vomitando como espuma, le dolía su barriga”, relató una de las mamás.
“Lo han llamado diciendo que su niño estaba en el Hospital de Huayllani, la señora vino y yo vine por su atrás, porque mis niños también están en el colegio”, contó una madre.
Asustada fue al colegio y vio como los menores se encontraban mal, “llegaron y sobre eso seguían llegando, con la preocupación yo me fui al colegio y en el colegio seguían cayendo los niños, entonces tenían que llevarlos a algunos al México y a algunos al Salomón Klein”, agregó.
Mientras eso pasaba en el colegio comenzaban a preguntarse que había pasado y eran diferentes las historias que se contaban sobre lo que habían consumido los niños, pero todo apuntaba a un desconocido y a unas pastillas misteriosas.
“Hemos encontrado unas tabletitas que habían consumido, una envoltura más que los cuales inmediatamente a los policías que han venido les hemos alcanzado”, explicó el director de la unidad educativa.
En total fueron 11 los menores afectados, los cuales recibieron las pastillas como si fueran “vitaminas” que les entregó el hombre.
“Un señor de negro dice con una polera negra con tatuajes, él dice que estaba regalando esos dulces para que se vuelvan más inteligentes, para que sepan más”, contó el menor testigo.
Varias versiones apuntan a un hombre con tatuajes y posiblemente calvo que regaló, vendió o entregó a los niños las “pastillas” que provocaron la intoxicación.
“Me dijo que un caballero estaba vendiendo dulces en la calle, pero que no tenía cabello y tenía tatuajes según ella qué dice, pero…Ella dice que le ha probado un poquito, he probado un poco como sabia feo lo he escupido me dijo”, relató otra de las mamás.
De los once menores afectados, la mayoría fue dado de alta y tres se quedaron internados para permanecer en observación.
“Tres niños que supuestamente ellos indican que han tomado más de media tabletita, entonces ellos por los síntomas que presentaban en el informe inicial los estamos internando para un control”, informó la médico de guardia.
Las envolturas que encontraron en el colegio daban cuenta que podía tratarse de alprazolam, pero por el color de las pastillas descartaron esto.
Las “tabletas” y las muestras de orina de los menores fueron enviados a laboratorio para determinarse el tipo de sustancia que provocó la intoxicación.
El hecho fue denunciado a la policía y efectivos de la Felcc y Felcn investigan el caso.