Un hombre identificado como “Edu Supervivencia” viralizó en Facebook las imágenes de un diminuto ser que halló en la cueva del Cerro de las Mitras, en Monterrey (México).
Al verlo en la cueva, Eduardo Jaime, el apasionado del senderismo y la supervivencia que está detrás del seudónimo, pensó que era un pájaro o un murciélago muerto pero pronto se dio cuenta que había dado con “algo” especial.
Los brazos de este nuevo espécimen parecen más largos que su cuerpo. Aunque está en posición fetal, se distinguen 20 costillas (los seres humanos tenemos 24) y sus dedos son muy parecidos a los del llamado “ser de Atacama”, un misterioso espécimen hallado en 2003 en un pueblo minero abandonado conocido como La Noria, en la región chilena de Atacama que llamó la atención del científico de la Universidad de Stanford, Garry Nolan.
También presenta analogías con otro diminuto ser que dimos a conocer en febrero de 2024 y que habría sido recuperado también en México, en las proximidades del Lago Cuitzeo, en el estado de Michoacán. El diminuto parece que está agarrándose las manos. Es importante señalar que, como el de Atacama, tiene callosidades en los pies, como si alguna vez hubiera andado.
Pero, a diferencia del ser hallado en Michoacán no tiene cordón umbilical por lo que Eduardo se convenció de que no era un feto. Pronto los usuarios de las redes empezaron a hablar de un extraterrestre, un hada o un duende, pues su gran cráneo y largos brazos no concordaban con un feto salvo que hubiera sido modificado.
Se da la circunstancia, además, de que el cerro donde fue descubierto es un lugar proclive a los avistamientos de ovnis. Lo más probable, sin embargo, es que se trate de un feto humano momificado o extraterrestre. La imagen que presentamos a continuación, del banco de iStock guarda un gran parecido. Agencias