México
Una «tradición» en el municipio mexicano de Calkiní desató una ola de indignación en las redes sociales y puso en alerta a las autoridades por un flagrante caso de maltrato animal.
Durante una fiesta patronal, se utilizaron piñatas rellenas con animales vivos, incluyendo iguanas, serpientes y pequeños zorros, las piñatas eran golpeadas hasta romperse.
Los videos y fotografías que circulan en internet muestran cómo los asistentes de la celebración rompían las vasijas de barro, que eran utilizadas como piñatas, y los animales caían y corrían aterrorizados mientras eran perseguidos y pisoteados por niños y adultos.
El material, que se volvió viral, exhibe cómo los animales, desorientados por los golpes, intentan huir al romperse las vasijas, solo para ser perseguidos y capturados por los asistentes.
Este acto fue duramente defendido por la comunidad como una costumbre centenaria, lo que ha reavivado el debate sobre si la tradición puede justificar la crueldad animal.
El incidente, ocurrido en el barrio de Kilakán, movilizó a la Fiscalía Especializada en Delitos contra Animales, Ambiente y Ecosistemas de Campeche, que ya ha iniciado una investigación formal. Según los primeros reportes, el evento contaba con autorización municipal, lo que podría implicar a las autoridades locales por permitir una práctica que constituye un delito grave en el estado.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Fiscalía fueron enfáticas al señalar que, aunque se trate de una costumbre, el maltrato animal está tipificado como delito en Campeche, con penas de hasta 4 años de prisión. Activistas y asociaciones protectoras de animales condenaron enérgicamente la práctica, calificándola de violencia y crueldad injustificada.
El caso ha generado un llamado urgente a la sociedad y a las autoridades para que se tomen medidas concretas y se garantice el bienestar de los animales, dejando claro que ninguna tradición cultural debe estar por encima de la ley.
Agencias.
