La Intendencia Municipal realizó operativos a diferentes panaderías de la zona sud de Cochabamba para el control de peso y precio justo. Se identificó varias irregularidades, incluso se clausuró una de ellas, que no tenía condiciones de salubridad.
“Hemos intervenido una panadería que si bien cumplían con el peso y precio justo, pero las condiciones de producción son lamentables, situación que nos obliga como autoridades a proceder con la clausura y la multa correspondiente para que empiece a producir bajo los estándares de salud que dice la norma”, dijo el jefe de defensa al consumidor Enrique Vizcarra.
Añadió que el 50% de las panaderías cumplen con los estándares de calidad, y el otro 50% no cumplen las condiciones de salubridad.
En los últimos días, los panaderos independientes realizaron una serie de protestas porque se sienten discriminados por Emapa, ya que no les quieren vender la harina subvencionada para poder producir el pan de batalla a peso y precio justo. Según la norma, el pan de batalla tiene que tener un peso de más de 60 gramos.