La noche del viernes, vecinos de la zona sur denunciaron a la policía una fiesta clandestina donde había niños que acompañaban a sus progenitores, corriendo riesgo de ser víctimas de abusos sexuales, extravíos u otra índole.
Efectivos policiales junto a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia se constituyeron a la zona sur para intervenir dicha fiesta, pues los menores oscilaban entre los 2 a 5 añitos de edad, quienes estaban sin alimentación ni abrigados.
Por otro lado, sus progenitores estaban en completo estado de ebriedad, no querían apersonarse a las oficinas de la Defensoría, señalando que no pueden quitarles a sus hijos ya que los estaban cuidando.
Los niños fueron llevados a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia para que familiares sobrios de sus progenitores puedan recogerlos, los responsables son arrestados y llevados a celdas policiales con fines investigativos.