Invasión de Boca a Río con 100.000 hinchas

Se sabe que Boca Juniors representa un fenómeno popular incomparable. Sin embargo, vale prepararse para vivir un momento histórico. Es que se viene la final de la Copa Libertadores, este sábado en el Maracaná, y habrá una invasión xeneize para la memoria, con más de 100 mil hinchas que ya empezaron a copar Río de Janeiro. Todo a pesar de que muchos no podrán ingresar al estadio, considerando que por el momento solo se venden 20 mil tickets para fanáticos azules y amarillos.

Hay voces oficiales que le ponen números a ese escenario impactante. Por ejemplo, la cónsul de Río de Janeiro, Ana María Sarrabayrouse, confirmó que ya se vendieron 87.000 pasajes desde Buenos Aires a la ciudad donde jugarán Fluminense – Boca. A esa cifra se le deben sumar aquellos que viajan en auto y desde otros lugares del mundo.

Desde este lunes, ya comenzaron a arribar hinchas de Boca a Río de Janeiro. Y por supuesto coparon las playas, aunque ahí se generaron los primeros incidentes. Hubo varios argentinos que denunciaron robos y agresiones.

El gran temor es qué ocurrirá con los aproximadamente 80 mil argentinos que no podrán acceder al Maracaná. En principio, ya fue inaugurado el Fan Zone, ubicado sobre la Avenida Atlántica, en las míticas playas. Ahí sería el festejo en caso de que Boca se consagre campeón.

Para observar el partido se analiza una alternativa: el Sambódromo. Ahí la prefectura ya empezó a instalar baños químicos, como para que los hinchas de Boca se puedan reunir allí y acampar. Para que coloquen pantallas gigantes y puedan observar la final en ese mismo lugar, falta el ok de la Conmebol cediendo los derechos para la transmisión en vivo en ese sitio.

En este contexto, las autoridades consulares argentinas y también Boca bajan múltiples recomendaciones para los hinchas, en especial por los gestos racistas que tienen una pena de 3 a 5 años de prisión efectiva. Por esta situación, ya varios fanáticos de otros equipos argentinos que viajaron a Brasil en este 2023 terminaron envueltos en problemas serios. No será un tema menor. Agencias