Una jovencita de 21 años de edad perdió la vida en un centro de salud de la zona sur de la ciudad de Cochabamba la mañana de ayer.
Según el informe preliminar, la joven habría ingerido sustancias fosforadas (raticida) lo que hubiera derivado en su muerte.
La joven era estudiante de la carrera de Turismo y Hotelería y vivía junto a su familia en la avenida Guayacán.
Según refiere la familia, la joven no habría mostrado ningún indicio que haga sospechar que estaba pensando quitarse la vida.
Aseguran que se despidió de ellos en la mañana con total normalidad y que luego se comunicó con su novio, para que se encuentren en la zona de Kara Kara, lugar donde él viviría.
Según el novio, cuando llegó al lugar donde habían quedado en encontrarse, la joven ya se encontraba en la vereda, botando líquidos por la mucosa y la boca.
«La primera sospecha de los médicos es que ella habría ingerido elementos fosforados, estamos a la espera del informe completo, porque el cuerpo ya fue trasladado al IDIF», declaró Tatiana Herrera, directora de Género Generacional de la Alcaldía.
La familia de la joven, al enterarse del hecho, reaccionó de forma violenta y comenzaron a culpar al novio de la muerte de la joven.
Los familiares decían que la joven al ser cristiana, no salía, no bebía, por lo que no pueden creer que haya atentado contra su vida y creen que las razones tendrían que ver con su relación con su novio.
Al verse atacado y señalado por la familia de la joven, el novio decidió huir del lugar, por lo que actualmente se encuentra en calidad de fugitivo.
Sin embargo, efectivos policiales están tras el paradero del joven, para que pueda brindar su declaración correspondiente sobre éste lamentable hecho.