En 2023 o nada. Los I Juegos Bolivarianos de la Juventud que Sucre debe organizar no deben pasar del próximo año, caso contrario, la Organización Deportiva Bolivariana (Odebo) adelantó que serán cancelados.
Con la fecha del evento internacional en el limbo, la preocupación se hace más latente en la Odebo, que ya marcó el límite de realización de los Juegos, que se vienen postergando desde abril de 2020 por distintos motivos (sociales, políticos, económicos y sanitarios).
“Los Juegos deben hacerse en 2023, de lo contrario, nos veríamos obligados a cancelarlos”, señaló el presidente de la Odebo, el colombiano Baltazar Medina, ayer, en un contacto con el programa El Rayo Gama Deportes de CORREO DEL SUR RADIO 90.1 FM.
Medina reiteró que “desde la Odebo hemos sido muy pacientes en esperar alguna propuesta de Sucre” y que “mientras más rápido tomemos una decisión, más garantías vamos a tener de que los países nos confirmen su interés de participación”.
Sin coordinación
En 2021, el alcalde Enrique Leaño había señalado que el municipio no contaba con recursos económicos para organizar el evento internacional en 2022 y que harían todos los esfuerzos necesarios para llevarlos adelante el primer cuatrimestre de 2023. Una postura que fue aceptada por Odebo.
Sin embargo, hace una semana, en la reunión de directorio del Comité Organizador de los Juegos Bolivarianos, la secretaria de Salud, Educación y Deportes, Silvana Flores, dio a conocer la postura de seguir postergando la justa hasta 2024. En la junta no participó el burgomaestre.
Y hace un par de días, Leaño reiteró la intención de realizar los Juegos en 2023. ¿Cuál es la postura real de la Alcaldía? Esa falta de coordinación para tener una postura institucional generó confusión en los demás integrantes del Comité Organizador y de la misma Odebo.
Sede compartida
Ante la imposibilidad que pareciera tener Sucre de organizar la justa bolivariana, Odebo no descarta programar algunos deportes en una subsede.