La estrella del pop llamó la atención en la alfombra azul con un look de dos piezas de color rojo pasión y acabado satinado. El conjunto estaba formado por un bustier con peplum bien ceñido, y una falda estructurada de silueta sirena.
Ambas piezas estaban confeccionadas como un corsé tradicional, es decir, con unos cordones en la parte trasera que permitían ajustar más o menos las prendas al cuerpo.
Ese detalle de corsetería dejaba a la vista un mínimo tanga negro que la artista llevaba como única prenda de ropa interior y también quedaba al aire la parte central de su trasero, robándose la mirada de los fanáticos y medios de comunicación en el evento.