La mató y metió el cuerpo en un turril y lo botó en un puente

Tras peregrinar durante dos años por justica para Shirley, la familia finalmente puede quedarse tranquila al ver que el asesino de su ser querido fue condenado a 30 años de prisión en el penal de máxima seguridad de “El Abra”, sin derecho a indulto. Y aunque la máxima pena no le devolverá la vida a la víctima, podrá descasar en paz.

Su abogado, quién es un funcionario policial, su hermana y su ex concubina fueron sentenciados a prisión por complicidad, puesto que intentaron desaparecer las evidencias que vinculan el cruel asesinato de Shirley en manos de Rodrigo Villarroel Rojas.

Condenan a prisión a Rodrigo por matar a su pareja

Rodrigo Villarroel Rojas, sindicado de feminicidio de Shirley B. de 38 años, tras estar dos años en la cárcel con detención preventiva, la mañana del viernes finalmente se llevó a cabo su audiencia, donde las autoridades competentes determinaron 30 años de prisión.

Asimismo, la hermana del feminicida, su ex concubina Nayva Torrico y Gustavo Céspedes abogado del imputado, fueron sentenciados a un año y medio por encubrimiento.

La mató y la puso en un turril para botarla debajo un puente

Shirley Nila García Barrientos, tenía 38 años, vivía sola en un departamento de Cochabamba y se ganaba la vida vendiendo uniformes e implementos policiales. Ella mantuvo una relación intermitente por cinco años con Rodrigo Villarroel, de 27 años, en ese entonces.

El 1 de noviembre de 2019, cuando Shirley se enteró de que él tenía, al mismo tiempo, un noviazgo de tres años con otra mujer, Pamela, le escribió a ella para contarle que estaba embarazada. Pamela declaró que Rodrigo le juró que lo del embarazo era una mentira y le aseguró que Shirley «pagaría por ello».

Shirley se había hecho una prueba de embarazo en octubre de 2019, y resultó positiva. Debía efectuarse una ecografía el 4 de noviembre, pero fue asesinada un día antes.

Justamente, el 3 de noviembre de 2019, Shirley y Rodrigo acordaron verse para que él vea el resultado del examen de laboratorio. Desde entonces, la mujer desapareció. El 18 de noviembre de 2019, su cadáver fue hallado dentro de un turril de plástico en Paracti.

Rodrigo se quedó con el celular de Shirley y fingió ser ella cuando una comerciante le escribió para ofrecerle pagarle una deuda de 10.000 bolivianos. Él quiso aprovecharse y cobrar el dinero de su víctima.