Con un Stephen Curry reconocido por primera vez como MVP, los Golden State Warriors vencieron el jueves 103-90 en la cancha de los Boston Celtics y finiquitaron las Finales de la NBA por un global de 4-2, conquistando su cuarto anillo desde 2015.
Stephen Curry, con 34 puntos y 6 triples, comandó el triunfo en el TD Garden de Boston y celebró el renacimiento de la dinastía de Golden State junto a sus eternos socios Klay Thompson (12) y Draymond Green (12).
«Al principio de la temporada nadie pensaba que estaríamos aquí, excepto todos los que están en esta cancha ahora mismo. Es surrealista», afirmó un radiante Curry sosteniendo su premio MVP (Jugador Más Valioso).
Ni la mística de Boston, ni la resistencia de Jaylen Brown (34 puntos) y el dominicano Al Horford (19) se interpusieron en el camino de unos Warriors que dieron por terminada una travesía en el desierto de tres años. Agencias