Leche de semillas de girasol: beneficios y preparación

La leche de semillas de girasol es un alimento que puede generar varios efectos positivos en el organismo. Es capaz de sustituir a algunas bebidas de origen vegetal, como es el caso de la de soja, de avena o de almendras. Se elabora a partir del prensado de las semillas y de la posterior extracción del líquido que desprenden. Además, cada vez se encuentra de forma más frecuente en los supermercados, convirtiéndose en una opción a considerar.

BENEFICIOS DE LA LECHE DE SEMILLAS DE GIRASOL

Hay que destacar el contenido en vitamina E de la leche de girasol. Hablamos de un nutriente que cuenta con un elevado poder antioxidante, tal y como evidencia una investigación publicada en la revista IUBMB Life. Consigue neutralizar la formación de los radicales libres y su posterior acumulación en los tejidos del organismo. Dicho efecto se relaciona con un mejor estado de salud y con una menor incidencia de patologías crónicas y complejas.

También hay que tener en cuenta que las semillas de girasol aportan una cantidad significativa de ácidos grasos cardiosaludables, sobre todo de tipo insaturado. Estos han demostrado mejorar el funcionamiento del corazón y ayudan a prevenir la aterosclerosis. Esta enfermedad supone uno de los principales factores de riesgo para el infarto y los accidentes cerebrovasculares.

Por otra parte, la concentración en magnesio y fósforo de la leche de semillas de girasol es interesante. En concreto, el magnesio es un mineral determinante dentro de la fisiología del descanso, según refiere un estudio publicado en la revista Nutrients. Mantener sus niveles en rangos adecuados puede prevenir trastornos relacionados con el sueño.

¿CÓMO HACERLA EN CASA?

Resulta relativamente sencillo elaborar en casa leche de semillas de girasol. Para ello se necesita una taza de semillas peladas y crudas y un par de tazas de agua. Se coloca más agua en un cazo y se incorporan las semillas, dejándolas en remojo durante al menos 3 horas. Pasado el tiempo, se escurren bien y se colocan en el vaso de una batidora.

Después solo habrá que añadir las 2 tazas de agua anteriores y triturar todo bien hasta conseguir una mezcla homogénea. Para finalizar, solo será preciso colar la bebida, evitando posibles impurezas. Se divide en frascos de cristal que se puedan cerrar perfectamente y se conservan en refrigeración. Puede soportar varios días sin mayores problemas.

En el caso de optar por una bebida de semillas de girasol de tipo comercial, lo mejor será comprobar en el etiquetado que no cuente con azúcares añadidos. Muchos de estos productos de origen vegetal concentran demasiados carbohidratos simples, lo que podría condicionar la salud.

La leche de semillas de girasol puede aportar también una buena dosis de proteínas, aunque de bajo valor biológico. Aun así, servirán como complemento para alcanzar los requerimientos diarios de estos nutrientes y mantener una buena salud muscular. De lo contrario, podría aparecer de forma prematura la sarcopenia.

La leche de semillas de girasol aporta bastantes nutrientes y calorías. Aunque no es óptima para sustituir a la leche de vaca, puede ser un buen líquido para incluir en la dieta.

Sobre todo, en el caso de pautas hipercalóricas que pretendan promocionar la ganancia de masa muscular. Para ello será determinante también optimizar el aporte proteico.

No te olvides que la mejor herramienta para garantizar un buen estado de hidratación es el agua mineral natural. No se debe sustituir en ningún caso por refrescos o por otros líquidos que concentren azúcares añadidos. La leche de vaca o las bebidas vegetales pueden estar presentes de manera controlada en la dieta. La clave está en la variedad y en el equilibrio. Agencias