«Cochabamba no solo hoy no necesita un alcalde, necesita un líder, que liderice para que Cochabamba salga por el camino del éxito de la victoria», declaró el alcalde José María Leyes, dando a conocer que no renunciará a su cargo y que por el contrario trabajará para frenar la pandemia del coronavirus.
Este anuncio lo dio la mañana del lunes, usando un megáfono y hablando desde el mismo balcón que cuando retornó a sus funciones en febrero de este año.
En su discurso señaló que para frenar los contagios de coronavirus, se necesita que el «Gobierno apoye a Cochabamba (…) que la Gobernación coordine con las alcaldías, que coordinemos entre alcaldías».
Aunque pocas horas antes el alcalde dio a conocer su determinación, volvió a reiterarla desde ambientes de la Alcaldía a un centenar de personas que lo proclamaban.
¿NUNCA RENUNCIÓ?
El pasado jueves 4 de junio, el alcalde, en una conferencia de prensa, leyó una carta en la que indicaba que se iba a «alejar» del cargo porque su gestión concluyó el 31 de mayo y no creía en el prorroguismo; además denunció que era amenazado para que deje la silla edil.
Sin embargo, según el asesor del alcalde, Alex Contreras, la carta nunca fue de renuncia sino de «alejamiento», por lo que Leyes continuará hasta «el último de su gestión».
VIOLAN CUARENTENA POR PROCLAMA
Como si de un show montado se tratara, la mañana del lunes, la plaza 14 de Septiembre se vio llena de las mismas personas que proclamaron a Leyes cuando retornó al cargo, siendo estas mismas personas las que la semana pasada iban casi todos los días a protestar en la puerta del Concejo exigiendo la renuncia de los concejales y pidiendo a Leyes que se quede.
Lo alarmante es que esta muestra de apoyo se dio en medio de una cuarentena, la cual impide que hayan más de 100 personas juntas en un lugar, además tampoco se vio el distanciamiento de metro y medio para evitar contagios; lo peor era que muchos dirigentes que estaban en la proclama se sacaban los barbijos para gritar más fuerte sus frases de apoyo.
POCOS CREYERON LA RENUNCIA
Tanto concejales como la población de a pie señalan que la renuncia de Leyes era un show y que continuaría siendo autoridad.
«Solo quería hacerse a la víctima para después seguir gastándose la plata del pueblo (…) Se hizo la burla de nosotros», comentó un abuelito que miraba con desaprobación como se juntaban los comerciantes para la proclama.
De igual forma, la concejal Celima Torrico cuestionó si alguien iba a creer que el alcalde iba a renunciar. «¿Qué iba a renunciar pues?… estando encima de la plata, manejando la plata», declaró.
Para el concejal Edwin Jiménez esta decisión no cambia nada la situación de la Alcaldía, y resaltó que esperan que «vayan a utilizar al menos los recursos económicos» que fueron autorizados para frenar los contagios de coronavirus y equipar al personal de centros hospitalarios.