Los delitos contra la vida silvestre aumentan el potencial de transmisión de enfermedades, como el Covid-19

Las enfermedades zoonóticas representan hasta el 75% de todas las enfermedades infecciosas emergentes e incluyen el SARS-CoV-2 que causó la pandemia de Covid-19, indica el Informe Mundial sobre Delitos contra la Vida Silvestre 2020 de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc, por sus siglas en inglés).

Los resultados del estudio manifiestan que, cuando los animales salvajes son saqueados de su hábitat natural, masacrados y vendidos ilegalmente, aumenta el potencial de transmisión de enfermedades zoonóticas, aquellas causadas por patógenos que se propagan de los animales a los humanos.

Los productos ofrecidos de las especies traficadas para el consumo humano, por definición, escapan a cualquier control sanitario o de higiene; por lo tanto, presentan riesgos aún mayores de enfermedades infecciosas

El Informe señala que los pangolines, que se identificaron como una fuente potencial de coronavirus, son los mamíferos salvajes más traficados en el mundo, y las incautaciones de escamas de pangolín se multiplicaron por diez entre 2014 y 2018.