El diario The Washington Post publicó este jueves, junto a la agencia estadounidense AP, un reportaje en el que se señala que Sebastián Marset usó equipos de fútbol para lavar dinero que proviene del narcotráfico. En la investigación señala que se patrocinó clubes y se compró dirigentes para lograr sus fines ilícitos.
La historia sobre el narcoimperio de Marset y su relación con el fútbol se basa en miles de páginas de documentos internos proporcionados por la policía paraguaya, uruguaya y boliviana, transcripciones de escuchas telefónicas obtenidas por The Washington Post, cientos de mensajes de texto del narcotraficante, así como entrevistas con funcionarios en tres continentes.
Sebastián Marset huyó de Bolivia hace casi un año, cuando se realizaba un operativo de captura en su contra, y del que aseguró desde la clandestinidad fue alertado por personal de las propias fuerzas de seguridad.
El reportaje menciona primero al Club Deportivo Capiatá, que actualmente juega en la tercera división del fútbol de Paraguay, equipo en el que Marset jugó en 2021 y relata llegaba a entrenar en un lujoso Lamborghini, cubierto de joyas y caros relojes.
Según el relato de quienes fueron sus compañeros en esa época, en Capiatá pagó jugosos premios a jugadores y dirigentes para hacer lo que le dé la gana, como jugar a pesar de ser bastante mediocre en el fútbol.
A finales de mayo de 2021, cuando su nombre empezó a aparecer en la lista de narcotraficantes buscados, dejó de ir a Capiatá para buscar un nuevo destino. “No sería la última vez que jugaría al fútbol profesional mientras estaba corriendo. Capiatá fue solo el comienzo, la prueba de lo que podía salirse con la suya”, señala el reportaje.
Y lo hizo, con identidad cambiada llegó a Bolivia y empezó a jugar en Los Leones de El Torno, esta vez como Luis Amorim. Los videos de los partidos que jugó en este club de la Asociación Cruceña de Fútbol (descendido a última categoría tras el escándalo) se hicieron virales y algunos extractos pueden verse en el reportaje del Post. Marset pudo comprar conciencias para ser habilitado ilegalmente y con una identidad falsa, según las investigaciones de la Fiscalía.
A un año de su fuga se desconoce su paradero, su nombre volvió a saltar a titulares tras la detención en España de su esposa, Gianina García Troche, que intentaba hacer escala en ese país cuando viajaba desde Dubái. Después de la captura de García Troche en España, Interpol Paraguay sospecha que el narcotraficante uruguayo está en Emiratos Árabes. Agencias