Más del 62% reprobaron la gestión económica de Arce

La Paz
En el último estudio de opinión del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag), realizado en Bolivia entre el 11 de octubre y el 6 de noviembre, el 62,3% de los encuestados califica como “negativa” la gestión de la economía del Presidente Luis Arce Catacora.
El estudio arroja información relevante sobre la percepción de la población boliviana, respecto de diversos temas políticos, económicos y sociales a tres años del inicio del actual Gobierno. Solo el 36,3% respondió que la gestión de la economía del actual Gobierno es positiva y el 1,4% no respondió
Para elaborar el estudio, la Celag explicó que en total se aplicaron 2.000 encuestas (49,3% mujeres y 50,7% varones) en los nueve departamentos. La selección de entrevistados se realizó controlando cuotas de género, edad y nivel socioeconómico.
En la pregunta relacionada a la gestión de la obra pública, el 59,4% ve como negativo el trabajo de Luis Arce y el 37,4% lo ve positivo. Al mismo tiempo, la imagen del mandatario boliviano es considerada negativa por el 54,5% de los encuestados, el 39,4% la ve positiva, el 4,9% no respondió, mientras el 1,2% no lo conoce.
En cuanto a la gestión general del país, el 50,8% ve que es negativa y el 47,2% positiva. Otras preguntas estuvieron referidas a la escasez de dólares, donde el 68,2% dijo que no le afecta y el enfrentamiento con Evo Morales (42,8%) es el principal conflicto en el futuro cercano.
Sobre el tema de la escasez de dólares se concluyó que este problema solo afectó en su día a día al 10,3% de los encuestados, mientras que para el 68,2% no fue relevante porque afirma utilizar solo bolivianos en su vida cotidiana.
Respecto del principal problema político en un futuro cercano, el 42,8% de los encuestados señaló que es el enfrentamiento entre Evo Morales y Luis Arce, seguido de lejos por la corrupción y el narcotráfico (21,5%) y el Censo (14,6%).
Asimismo, los medios de comunicación son percibidos por la mayoría de la población (58,1%) como defensores de intereses económicos y políticos en vez de informar objetivamente. Agencias