Masistas se enfrentaron a gritos, golpes y chicotazos

La Paz
Masistas del ala “evista” y “arcista” se enfrentaron este lunes en puertas del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, donde los primeros habían instalado una vigilia en espera del resultado de la audiencia de Amparo Constitucional presentado por el dirigente de la CSUTCB Lucio Quispe para desconocer a la dirigencia de este partido.
Hasta el lugar llegó un grupo de “arcistas”, gran parte de ellos utilizando barbijos, quienes fueron identificados por los miembros del otro frente como funcionarios públicos. Entonces comenzaron las agresiones verbales mientras un cordón policial evitaba el choque entre los dos grupos.
Mientras los “evistas” gritaban “¡Lucho, traidor. Te espera Chonchocoro!” en el otro frente respondían frases como “¡Vilma, Vilma, vaya a trabajar!”, aludiendo a la concejal de El Alto Vilma Alanoca, quien se encontraba en la vigilia en horario laboral.
Los insultos iban y venían hasta que un grupo de los denominados Ponchos Rojos (campesinos de la provincia Omasuyos que por años respaldaron al jefe masista Evo Morales) apareció del lado del bloque “arcista”, se acercó a los “evistas” y comenzó a repartir latigazos mientras los otros intentaban defenderse a golpes y usando lo que tenían en manos.
Entonces la Policía tuvo que intervenir utilizando gases para evitar los enfrentamientos y, aunque varias filmaciones muestran que los agentes químicos fueron rociados contra personas de ambos frentes, justamente para evitar más choques, los “evistas” interpretaron que fue un ataque de la Policía contra ellos.
Es el caso del dirigente Pedro Llanque, quien entrevistado por Radio Kausqachun Coca afirmó: “Denunciar a la opinión pública que la militancia y dirigentes hacíamos vigilia pacíficamente, no insultamos ni provocamos, hasta que supuestos dirigentes de funcionarios púbicos se disfrazaron de Ponchos Rojos y la Policía nos gasificó a nosotros. Se están parcializado”.
Lanzó además una advertencia al presidente Luis Arce Catacora. Dijo que si las cosas continúan así podrían convulsionar el país y enfrentarse a sus defensores. Agencias