Matan a profesora con golpes y un cuchillazo en el cuello

Santa Cruz
Ascensión de Guarayos está consternada por la trágica muerte de una joven profesora de gastronomía de 28 años, quien fue encontrada sin vida la noche del miércoles 11 de septiembre en el barrio San Gregorio, cerca de una unidad educativa local. La Policía investiga homicidio.
La profesora fue identificada como Marisabel Moirenda Urape, de 28 años de edad, era soltera y no tenía hijos.
Marisabel salió con la misión de entregar alimentos a los bomberos voluntarios que combaten los incendios forestales en la región. Sin embargo, nunca regresó a su casa, lo que activó la preocupación de sus familiares y vecinos. Fue encontrada por unos niños a un lado de la carretera hacia el Beni, en una zona despoblada. El cuerpo de la joven presentaba signos de violencia, incluida una herida cortante en el cuello y golpes en la cabeza. Su motocicleta fue encontrada cerca de la escena, pero el bolso que llevaba desapareció.
La fallecida, quien en los últimos días se había dedicado a cocinar para los bomberos, era una figura muy querida en la comunidad. Llevaba seis años impartiendo clases en una unidad educativa local, y su compromiso con las labores voluntarias durante los recientes incendios había sido muy destacado.
La Policía levantó el cuerpo de Marisabel y lo trasladó a la ciudad de Santa Cruz de la Sierra para realizar la autopsia que determinará las causas exactas de su muerte. El informe preliminar señala que fue víctima de un brutal ataque. Las autoridades iniciaron una investigación para esclarecer los hechos, mientras los pobladores exigen justicia por el cruel asesinato de la joven profesora.
Teresa Urape, madre de la profesora, expresó su dolor y desconcierto: “Era una buena señorita, ayer (miercoles) la vi, estábamos juntas. A las 16:00 salí de mi casa y me dijo que iba al colegio, pero no volvió. Pido justicia, porque no sé quién me quitó a mi hija. Ella era mi vida y quisiera que volviera sana, aunque sé que nunca más me va a hablar”.
Los familiares de la profesora, incluida su tía, también pidieron justicia y se vieron desolados por el crimen. “Pido justicia por mi sobrina porque le han hecho esto”, manifestó la tía de la víctima. Agencias