El suceso se produjo en la vivienda de familia en EEUU, cuando Seth Settle se encontraba fumando un puro (habano) en su cuarto y su madre, de 52 años, entró para increparlo y decirle que parara de fumar. La recriminación y orden no gustaron al joven, quien, justo en el momento en que su madre salía del cuarto y cerraba la puerta, habría sacado una pistola y disparó, con la mala fortuna de que la bala atravesó la puerta y acertó en el corazón de la mujer.
Settle dijo a los agentes de la policía que el arma se le había disparado de forma involuntaria, que salió del cuarto y encontró a su madre tendida en el suelo inconsciente. Declaró que pidió a otra persona en la casa que llamara a una ambulancia y se marchó del lugar en un automóvil. Pero el comunicado de la oficina del alguacil señala que los investigadores del caso interrogaron al joven y encontraron que «dio cinco versiones distintas de dónde había arrojado el arma». Agencias