Un hecho delictivo que terminó con la muerte de un anciano y tomo tintes cinematográficos luego de que la Policía descubriera no solo al autor del crimen, sino también su raid criminal posterior al asesinato. Raymundo Barrionuevo de 84 años vivía solo en su casa del barrio San Ramón de la capital de Catamarca. El pasado lunes 16 de enero su hijo lo encontró apuñalado en el comedor sobre un charco de sangre.
“La autopsia comprobó heridas en la cabeza, múltiples puñaladas en cuello y tórax y sufrió “un shock hipovolémico tras lo cual murió desangrado”, revelaron en América Noticias.
La Justicia pudo comprobar gracias al control de las cámaras de seguridad al autor del crimen, no obstante, fue otro hijo de Barrionuevo quien descubrió que se trataba de su cuñado, Ezequiel “Peque” Condori. “Según la investigación, este hombre que venía de caravana y alcoholizado, se trasladó hasta la casa de su suegro”, según explicó el periodista José Echeverría.
Luego de cometer el asesinato de Barrionuevo, Condori se fue en taxi hasta una ciudad (en la zona de Balconsa) a casi 100 kilómetros donde pagó un asado para varios amigos, tras comer y beber, se encargó de saldar algunas deudas y regresó a la capital para formar parte del velorio de su suegro. Luego de confirmar su autoría, Condori fue detenido e imputado por el delito de «homicidio doblemente calificado por ensañamiento y criminis causae», y podría recibir una pena de cadena perpetua si es encontrado culpable.
Condorí, quien había sido arrestado tras un allanamiento en su domicilio -materializado por el personal de la División Homicidio, que logró tras tareas de investigación llegar a él y, además, secuestrarle prendas con posibles manchas de sangre y un teléfono celular-, pasó a detenido al ser informado el fiscal Gober por el médico de la Policía de que el sospechoso presentaba lesiones corporales compatibles con la defensa que ejerció Reymundo Barrionuevo cuando era ultimado con un arma blanca el domingo de la semana pasada en horas de la madrugada, cuando ingresó a la vivienda del jubilado en el barrio San Ramon. El móvil del asesinato fue el robo. Agencias