Una joven madre Camila Rojas, quien junto con su pequeña hija de cinco años habitaba una vivienda en la ciudad de La Serena, región de Coquimbo, donde la misma fue brutalmente agredida por un vecino de la casa colindante, que tras el sangriento asesinato fue identificado como Francisco Novoa.
Según relatan los informes de la policía que investiga el caso, el hombre ingresó a su domicilio en horas de la presuntamente en total estado de ebriedad, con la intención de atacar sexualmente a la menor, reportó el portal 24 Horas.
Ante la escena, la madre intentó proteger a su hija y lamentablemente fue acribillada con más de 100 puñaladas con una arma blanca (cuchillo), con la que el agresor también le causó varias heridas a la niña. Todo esto ante la presencia de su hermana de nueve años de edad; informó Tele13.
“A la menor de edad le propinó diversas heridas corto punzantes en distintas partes del cuerpo, especialmente en la zona de la espalda, no logrando darle muerte por la defensa de su madre, quien no corrió con la misma suerte”; detalló el fiscal Carlos Vidal, a cargo de las investigaciones.
La directora del Servicio Nacional de la Mujer, Priscilla Olivares Verasay, se refirió al hecho y declaró que el organismo gubernamental está “haciendo todas las gestiones necesarias para que el horrible femicidio contra Camila no quede impune y se juzgue al culpable con todo el rigor de la ley”.
Luego del homicidio, el único sospechoso por el crimen, Francisco Novoa Ibaceta, de 40 años de edad, fue entregado a las autoridades por su propia familia tras enterrase del terrible asesinato.
La Justicia indagó sobre el vecino de Rojas; y descubrió que tiene antecedentes penales e incluso una condena previa por los delitos de hurto y abuso sexual.
Novoa quedó detenido con prisión preventiva por los delitos de homicidio calificado consumado y homicidio frustrado, y permanecerá bajo arresto durante 180 días; mientras se desarrolla la investigación. Agencias