Una discusión entre dos vecinos, a causa de una deuda pendiente, terminó de manera trágica con el asesinato de uno de ellos, cuyo cadáver fue lanzado por un barranco en la parte alta del barrio El Río, con la esperanza de que nunca fuera encontrado, en tanto que el presunto autor del crimen se trasladaba en horas nocturnas a la residencia de la víctima para apoderarse de objetos de valor.
Voceros policiales manifestaron que un grupo de detectives de la Brigada Contra Homicidios del Cicpc Táchira se trasladó a principios de la semana pasada a una zona boscosa del sector Bellavista, en la parte alta del barrio El Río, donde los lugareños manifestaron haber hallado el cadáver de un hombre con múltiples heridas de arma blanca.
No obstante, por iniciativa de los mismos vecinos, luego se estableció que se trataba de José Gregorio Zambrano, un obrero residente en esa zona que sus familiares reportaron como desaparecido, desde el día 13 de diciembre, cuando salió de su residencia
Detectives de la Brigada Contra Homicidios del estado Táchira explicaron que, una vez verificaron la identidad del fallecido, se trasladaron hasta la residencia de la víctima para realizar la inspección y de inmediato descubrieron que algo irregular estaba ocurriendo. Detectaron violencia en puertas y ventanas. Se determinó, con familiares del fallecido, que en efecto personas desconocidas habían ingresado a la casa y varios objetos propiedad de Zambrano estaban desaparecidos.
La experiencia de otros casos les hacía suponer que el autor de los hurtos era una persona del mismo sector, donde vivía la víctima. Pronto fueron informados que un hombre, de nombre J. L. Solano Blanco, venezolano de 21 años, había sido visto de manera sospechosa merodeando por la casa del ciudadano asesinado.
El sujeto daba explicaciones de diversos tipos para desvincularse del crimen, pero entre más hablaba, más se hundía. De repente, uno de los funcionarios le pidió que explicara el origen de las heridas que tenía en sus manos, ante lo cual palideció, sin poder presentar ningún argumento claro.