El París Saint Germain parece que finalmente logró pasar de página tras la eliminación de la Champions League en manos del Real Madrid. Rumbo a un nuevo título de la Ligue 1, en los últimos dos encuentros del cuadro de la capital se vio la mejor versión del tridente de ataque Messi, Mbappé y Neymar. Con 11 goles en total en los duelo frente al Lorient y Clermont, en Francia aseguran que la dupla sudamericana habría aceptado su rol de acompañantes para hacer brillar al delantero de Les Bleus.
Entre su llegada tardía al club, los constantes viajes para estar junto a la selección argentina y algunas molestias físicas por la carga de partidos, Lionel Messi no tendría la misma influencia en París que la que alguna vez tuvo en el vestuario del Barcelona según afirmó el periodista Dominique Sévérac en el diario Le Parisien. Más allá del rol central que naturalmente ocupa, el argentino se mostró consciente del diagrama parisino: no se encerró en su posición de ataque y buscó acomodarse. Su lugar en el terreno de juego, al que se ha adaptado pero que en ocasiones le cuestiona sobre su uso más eficaz, indica un retroceso en el campo respecto a los últimos años.
Según informó Le Parisien, Mauricio Pochettino ve a su compatriota más como un mediocentro que como un goleador, manteniéndolo alejado del área donde ya se convirtió en una zona exclusiva reservada para KylianMbappé que acumula un total de 20 anotaciones y 14 asistencias en lo que va de la temporada. Con este enfoque, la sociedad de Messi con el delantero francés es cada vez mejor y los roles se diferencian partido a partido dentro de la cancha: de sus trece pases gol, la Pulga repartió seis para la Tortuga.
Pochettino, “Es insustituible Mbappé, en velocidad es el mejor del mundo y el PSG debe hacer todo para que se quede. Pero yo creo que ya lo tiene decidido. Quiere más y es normal. Si hubiera jugado sus tres últimas temporadas en Inglaterra o España ya habría sido Balón de Oro. Si se va, habrá que agradecerle todo”. Al final, el tiempo le terminó dando la razón.