Un adolescente de nacionalidad peruana vivió una verdadera pesadilla en el municipio de Sacaba, donde vivía junto a su padre y su madrastra, quienes lo sometieron a violencia extrema y además lo tenían amenazado para que guarde silencio.
Según el relato de su madre, el menor fue traído a nuestro país por su padre cuando tenía nueve años y desde entonces perdió contacto con él.
Lo que nunca imaginó la mujer es toda la violencia que sufría su hijo a manos de su propio padre, quien además permitía que su pareja lo agrediera.
La violencia ejercida llegó al punto de que la madrastra le rociara alcohol y le prendiera fuego al menor, provocándole quemaduras de primer, segundo y tercer grado durante octubre de 2023, fecha en la que se registró el hecho.
La agresora usó como excusa que el menor habría tomado sin permiso 100 bolivianos.
“Mi hijo dice que él ha agarrado 100 bolivianos a escondidas, si reconoce él que ha agarrado, pero que en el futbol que había prestado para sus compañeros le iban a devolver”, señala.
Según el testimonio del menor, la agresora lo tomó por sorpresa al prenderle fuego y no hizo nada para apagarlo.
“Su madrastra le hace pasar de frente a su dormitorio y entonces él dice que cuando ingresa, él ve tres cuchillos en su cama, él se ha ido, se ha corrido dice, así prendido en llamas, se ha ido a una ducha y se ha apagado él solo”, agrega.
Una vez que la madre del menor logra encontrar su dirección, lo busca y se da cuenta de que presentaba quemaduras en gran parte de su cuerpo, como el brazo, pecho y rostro.
“Él para su papá y su madrastra era como un saco de boxeo, cuando venían borracho”, agrega.
En sus declaraciones, el menor confirmó que a la semana era golpeado al menos 3 veces, “eran patadas en su espalda, cocachos, cachetadas con cable de cargador, hasta porque contestaba le pegaban”, denunció.
Una vez que formalizaron la denuncia, la pareja fue aprehendida por efectivos policiales y trasladada hasta la Fuerza especial de lucha contra la violencia de Sacaba.
“Se ha pasado ya la denuncia ante la fiscalía, entonces en esa instancia se está llevando a cabo el caso para que pueda esa instancia hacer cumplir los derechos humanos…en este caso de este niño que ha estado sufriendo presumiblemente violencia física, violencia psicológica”, explicó el director de Desarrollo humano de Sacaba, Gualberto Chávez.
La madre del menor pide justicia y que tanto el padre como la madrastra sean enviados a la cárcel.