Mesa culpa a Añez y Camacho por victoria del MAS

Para el excandidato a la Presidencia y líder de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, las candidaturas de la presidenta Jeanine Añez y Luis Fernando Camacho, por las agrupaciones Juntos y Creemos, contribuyeron al triunfo del MAS en los comicios presidenciales del 18 de octubre.

“El Gobierno de transición equivocó su rol, traicionó su mandato de presidir y garantizar unas elecciones limpias y entregar el gobierno al ganador, y decidió ser protagonista postulando a la presidenta Jeanine Áñez como candidata, lo que generó una falsa expectativa sobre sus opciones”, sostuvo Mesa en un artículo en el que expresa su postura.

En la nota, el exmandatario destaca también que el triunfo del MAS se debe en segunda instancia al surgimiento de Luis Fernando Camacho y Marco Pumari, binomio de la Alianza Creemos, al dejar de lado los comités cívicos que presidían en 2019.

“El segundo (factor), que como producto de la resistencia popular surgió la figura del líder cívico Luis Fernando Camacho como una alternativa de renovación en el nuevo panorama electoral”, agregó el expresidente.

Por lo tanto, el excandidato de CC concluyó que la consigna de la disidencia al MAS era “todos contra Mesa”. Y señaló que “la oposición al MAS se ocupó con ahínco de criticar mi candidatura más que la de Luis Arce”.

Mesa también arremetió contra quienes fueron sus rivales electorales y otrora aliados políticos en los comicios de 2019.

“De ese modo se desperdició lo logrado por CC. Aparecieron así la candidatura de Añez que incorporó a varios aliados de CC y a Samuel Doria Medina de UN, que quiso ser la argamasa aglutinadora de la oposición. La candidatura de Camacho —que intentó fallidamente entrar a occidente a través de Marco Pumari— quien expresaba más bien una visión regional”, consideró.

Y bajo esa línea añadió: “La candidatura del expresidente Tuto Quiroga, que pretendía ser la clave de la ‘derecha moderna y tecnocrática’. La candidatura de Chi Hyun Chung que en 2019 había logrado un porcentaje no desdeñable de votos de una militancia religiosa que, como se vio después, se había desprendido circunstancialmente del MAS”. Agencias