“Mi dueña de casa me dijo que desocupe, que el Ministro me dé vivienda”

Lourdes Pacheco, la mujer que fue acusada por la Policía y el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, como la responsable del rapto de la bebé Samanta, llegó a La Paz para declarar que desde que las autoridades pusieron su foto a circular en las redes sociales, ella y su familia viven un calvario que llegó al extremo de que su dueña de casa le pidió dejar su vivienda.

“Necesito que me ayuden psicológicamente. No sé quién les dará el pan de cada día a mis hijos. Mi dueña de casa me llamó, me dijo que desocupe. Que el señor (Arturo) Murillo me dé vivienda y de comer, como él me difamó quiero que se aclare públicamente”, señaló la afectada.

Pacheco agregó que gente de la “Defensoría y la Guardia Municipal” fueron a buscarla a su casa, en el distrito yungueño de Guanay, lo que dejó preocupados a sus familiares y amigos.

Todo comenzó la mañana del jueves, cuando el Ministerio de Gobierno publicó la foto de la mujer que vive en los Yungas.

“Pedimos al pueblo de Bolivia nos ayuden a encontrar a la niña de un mes de nacida, secuestrada. Esta mujer tiene un mechón blanco, sería la presunta secuestradora, también tiene en la mano izquierda muchos queloides, cicatrices. Si la ven alerten al primera policía que vean”, escribió Murillo en su cuenta de Twitter.

La señora contó que por la tarde, cuando se encontraba en La Paz, se presentó de forma voluntaria en oficinas de la Policía, para aclarar la situación. Se enteró que su foto estaba en las redes sociales porque le llamaron desde el pueblo donde vive.

“Estaba por el puente Minasa, tenía que hacer unas compras. Me llamaron de Guanay y me dijeron que mi foto estaba en las redes sociales. Me fui a comprar crédito y comencé a buscar, vi una foto que me hice sacar el año pasado”, relató a Unitel.

La mujer explicó que llegó a La Paz para visitar a un familiar que está en terapia intensiva del Hospital Obrero, sin sospechar que sería acusada falsamente y tendría que verse en la necesidad de aclarar el error de las autoridades.

Lourdes tiene seis hijos, llegó a la sede de gobierno con tres de ellos, a quienes dejó en un hostal mientras visita los medios de comunicación para aclarar que ella no tiene ninguna relación con el rapto de la bebé.

“Pido que devuelvan a la niña y le ruego al señor Murillo que no hable por demás de mi persona, yo no soy alcohólica, jamás he compartido con él, tampoco no me vio en las calles borracha. Necesito que aclare en las redes sociales, que desmienta y necesito garantías porque la gente discrimina, más en un pueblo pequeño donde soy muy conocida”, lamentó. Agencias