Los abucheos e insultos recibidos por el premier Gustavo Adrianzén en Puno el pasado 23 de mayo fueron responsabilidad de un grupo enviado por el expresidente de Bolivia, Evo Morales, para “agitar” a “separatistas aymaras”, denunció el primer ministro en una entrevista con el programa Panorama para dar a conocer que todavía el expresidente de Bolivia interviene en su gobierno.
En la entrevista, el primer ministro explicó que visitó Puno porque fue una región que le mostró apoyo a la mandataria cuando asumió el cargo de la Presidencia del Perú, en diciembre del 2022.
“La Policía Nacional encapsuló a esas personas para darles protección y que el resto de la plaza que estaban protestando en contra de ellos, se calmara. (…) Evo Morales, que está impedido de ingresar al país, agita el sur y a nuestras provincias haciéndoles creer que puede haber separatismo y que va a haber una nación aymara independiente”, afirmó. Agencias