Un barrio es asediado por la delincuencia, los dueños de cuatro viviendas se vieron sorprendidos luego de que monrreros ingresaran a sus casas y se llevaran todo que encontraron de valor.
Una de las familias que fue víctima de robo salió de su vivienda con dirección al municipio de Quillacollo, donde buscaban ganar algo de dinero comercializando productos; sin embargo, una llamada cambiaria sus planes.
“Yo salgo a vender a las 9 de la mañana, mi inquilina me llama, me indica que se habían entrado a mi casa”, relató uno de los afectados a la Red Unitel.
Al llegar vieron que los delincuentes forzaron las chapas y destrozaron las habitaciones para encontrar objetos de valor que sustraer.
El robo no fue cometido en su totalidad, ya que los dueños de la casa encontraron algunas cosas como televisores reunidos cerca de una puerta que al parecer no lograron llevarse los delincuentes.
“Todo mi esfuerzo he retirado, dinero para construir otra casa en Sacaba, para comprar material y estaba acá”, agregó el afectado.
Tras conocerse el primer caso, los vecinos se percataron que los delincuentes también ingresaron a otras viviendas de la cuadra, los ladrones habrían trepado el techo y saltando las paredes de las casas vecinas también ingresaron a robar.
“Todas las puertas abiertas, todo destrozado, había estado, han sacado todo, han buscado, han hurgueteado, los celulares de las cajas han sacado”, explicó la dueña de la segunda casa afectada.
De la vivienda se llevaron alrededor de 12 mil bolivianos y objetos de valor.
“En la mañana a las ocho tenía que ir a vender a Cliza, vendo sabanas, entonces me tenía que ir, mi vecino aquí a lado dice que se había percatado y nos llamó”, agregó la víctima.
Los vecinos aseguran que no son los únicos robos que se registraron en la zona y aseguran que están cansados de esta situación.
“Estamos hartos de la inseguridad, cada vez son los robos, la delincuencia, las malas chicherías que aquí abajo hay. Nosotros queremos que se haga un barrido”, aseveró otro vecino.
Ante los robos en las casas, los vecinos anunciaron asumir medidas de presión.