Se «realizó el levantamiento de 13 cadáveres tras los enfrentamientos registrados al interior del CRS (Centro de Rehabilitación Social) de Cotopaxi», en el centro del país, señaló la Fiscalía en su cuenta de Twitter.
Los cuerpos fueron trasladados al departamento forense de la vecina localidad de Ambato, en la provincia de Tungurahua, mientras continúan los trabajos en la prisión.
La Fiscalía agregó en otro trino que los choques dentro de la penitenciaría del litoral en la provincia de Guayas (suroeste) dejaron «8 privados de libertad fallecidos», con lo que suman 21 muertos en ambos motines.
Entrada la noche del miércoles, el Servicio Nacional de Atención Integral a Privados de la Libertad había reportado 18 muertos en ambas cárceles y alrededor de 50 heridos, entre ellos uniformados. Este jueves la policía ecuatoriana reportó en la misma red social un intento de fuga del centro de rehabilitación social de Cotopaxi.
Los uniformados, junto con efectivos de las Fuerzas Armadas, impidieron «la evasión de 31 reos que pretendían fugar» de la prisión, ubicada en el ingreso a la ciudad de Latacunga, capital de la provincia de Cotopaxi, anotó la policía.
Las cárceles de Guayas y de Cotopaxi fueron dos de las cuatro prisiones en las que se produjeron sangrientas revueltas simultáneas en febrero, con saldo de 79 reclusos muertos y una veintena de heridos, incluidos policías. La semana pasada los uniformados detuvieron a una persona que intentó ingresar fusiles, pistolas, explosivos y municiones a la cárcel de Guayaquil.
Ecuador tiene alrededor de 60 penales con capacidad para albergar a 30.000 personas, pero en la actualidad ahí cohabitan cerca de 39.000 reclusos. El índice de hacinamiento en las prisiones del país bordea el 30%.
Para intentar frenar la violencia carcelaria, el gobierno del expresidente Lenín Moreno, que concluyó en mayo pasado, decretó el estado de excepción en algunas ocasiones. La última medida estuvo vigente hasta noviembre del año pasado. Agencias